domingo, junio 29, 2003

Hay un cuento de Dick que me gusta mucho y que volví a leer hoy. Se llama "La máquina preservadora". Es un cuento que podría ser definido como "menor", pero es muy divertido.
La razón por la que me gusta es porque trata sobre una máquina que sirve para materializar música, transformandola en animales. El planteo básico del cuento trajo a mi mente 2 cuestiones:

a) La idea de la música como un algo tangible y existente, aún mas como un animal, es algo que me despierta muchisima curiosidad. Si hay algo que me disgusta del cuento es que no haya mas descripciones de animales musicales. Por supuesto que el planteo es un tanto simplista y la idea de que una categoría totalmente distinta a otra, pero nacida de la misma, reproduzca las características de lo que le dio origen está muy usada, pero....¿a quien no le gustaría ver que tipo de animal saldría de un disco de Mogwai, o de un disco de Bowie, o de cualquiera de los artistas que escuchamos?.

b) En el cuento usan música clasica, despues de todo, fue publicado por primera vez en 1953. Lo gracioso es lo reconocible que son los animales que esta produce, hasta el observador mas casual puede encontrar el correlato entre la música y el animal. Y me puse a pensar que tipo de artistas de musica "popular" (por llamarla de algún modo) podrian entrar en una version pop de este cuento. O sea, todos saben quienes son Schubert, Mozart y Beethoven, nadie duda de su validez como representantes de la música clasica, nadie duda de su canonizacion. Pero me imagino que siempre habría quejas por los artistas usados en una version "pop". No se si sera por la distancia que nos separa de la música "clasica" o por el hecho de que ahora se produzca una cantidad infinitamente mayor de música, pero es curioso ver la manera en que el espectro se ha fragmentado y dividido y en que estas fragmentaciones son observadas y criticadas, como hay una postura y un análisis para cada una de ellas, lo cual las hace practicamente inutilizables como "canon" o "ejemplo".
Lo cual nos trae a otra cuestión: ¿cual es el canon?, ¿el de la revista rolling stone o el de the wire?, ¿hay un canon?, ¿que clase de contacto tiene el "hombre de la calle" con la musica pop?, ¿hasta que punto la masa de la población reconoce los iconos pop?. Y si no los reconoce ¿que tienen de pop?.
Yo creo que la cultura se ha fragmentado de una manera tan grande que ya es dificil encontar esos iconos reconocidos por todos y aceptados por todos que, al ser universales, son asépticos y maleables de brindarles la significación que nosotros queramos.
Debo reconocer que aca tengo un hueco ya que mas allá de Alta Fidelidad no conozco ningun uso de la música pop (real, producida en nuestro mundo, si hay muchos usos de iconos, imágenes, el mundillo, pero ficcionados) en la literatura. Y quizás esta sea una razon.