lunes, septiembre 22, 2003

Carroll

Lewis Carroll era un genio. De eso no le cabe ninguna duda a nadie. A pesar de que todo el mundo lo conoce por los libros de Alicia, hay varias cosas increibles a las que nunca se le dio la necesaria bola (mas que nada sus cartas, algunas de las cuales son obras maestras del absurdo, me acuerdo de una en que le probaba mediante una ecuación a un amigo matematico que 2+2 eran 5).

Entre todas estas genialidades hay un librito muy chiquito "La caza del Snark", en realidad, mas que una novela, es un poema en prosa, escrito con ese estilo tan delirante al que nos tiene acostumbrados.

El libro trata sobre la búsqueda de un grupo de personas, tan dispar como delirante, de un animal mítico llamado el Snark. Hay dos tipos de Snark, los que son inofensivos y los que son boojum...el problema es que nadie sabe como son, porque todos los que se han encontrado hasta la fecha son boojum y todos los que lo han visto han desaparecido.
Pero mejor dejemos que Carroll mismo nos explique que es un Snark:

“Vamos, escuchad, muchachos, que yo os repito las
cinco inconfundibles caracteristicas por las cuales, en
todas partes, podréis reconocer a los Snarks garantizados
auténticos.
Considerémoslas en su orden. La primera es el sabor,
que es magro y pérfido, pero crocante, como un traje
demasiado estrecho en la cintura, con no se que fragancia
de Fuego Fatuo.
Su manía de levantarse tarde, que es la segunda, convendréis
que la lleva un poco lejos cuando os diga que el Snark,
muy a menudo, desayuna a la hora del té, y no almuerza
nunca antes del día siguiente.
La tercera es su lentitud para comprender los chistes.
Ante el, si por azar arriesgáis alguno, el Snark suspirara
como un alma afligida y jamas reirá ante un juego de palabras.
La cuarta es su pasion por las casillas de baño, que
arrastra consigo en cualquier ocasión. Las cree una
contribución a la belleza de los paisajes, opinión discutible
y sujeta a caución.
La quinta es la ambicion. Será conveniente describir en
seguida cada especie particular, distinguiendo aquellas
que tienen plumas y muerden de aquellas que usan
bigotes y disponen de garras…”


Yo insisto con la idea de que este libro debería ser lectura obligatoria en todas las escuelas primarias.